Seguridad y Transparencia Absoluta!
Posted in: Crecimiento Espiritual on June 20, 2012
Históricamente la humanidad hemos temido todo lo que desconocemos y esta fuera de nuestro control. La realidad es que todo está fuera del control de nuestro ego, sin embargo, tu seguridad descansa y depende de la verdad.
Dios no negocia, pide, exige ni necesita nada de ti. Es imposible perder el amor de Dios.
La caída del ser humano no se debe a un dios arbitrario, caprichoso, tendencioso, ni con favoritismos o deseos ego maníacos. Los seres humanos seguido nos hemos sentido resentidos, abandonados, rechazados, castigados y hasta repudiados por Dios.
Lo que pasa es que Dios en su infinita sabiduría y amor establece ciertas leyes universales y esas leyes son el fundamento de la Realidad. Si vives de acuerdo con la realidad experimentas el paraíso siempre y donde estés. Si te resistes, violas o evades las leyes de la realidad entonces sufres. Sin embargo, no sufres por castigo de Dios, sufres simplemente por intentar vivir en desacuerdo con lo que es real.
Por ejemplo, la ley de la gravedad es imparcial. La ley de la gravedad no juzga, ni distingue entre una persona delgada, una obesa, un auto, una pelota ni cualquier otro objeto. Unos pueden creer que la ley de la gravedad es injusta y que es buena con los delgados y mala con los obesos. Sin embargo, esa observación es ridícula. La gravedad simplemente es y es pareja con todos y siempre.
Las leyes de Dios son similares a la gravedad. Dios no favorece a un individuo, grupo, familia, país, continente, religión, ni juzga arbitrariamente. Dios ama toda su creación igual. La realidad es que somos Uno y la ley que reconoce esa realidad es el amor. Los que disfrutan de una vida rica en amistades, alegría, paz y amor es por vivir de acuerdo con esos principios que se basan en la realidad. Los que sufren actúan con egoísmo. El egoísmo es creer que somos separados y que “Yo” soy mejor, más importante y primero que otros.
Es sumamente importante reconocer que Dios es amor universal. Dios creo todo, sostiene todo y es la esencia de la cual emana absolutamente todo. Dios ama a toda su creación de manera igual. Tu seguridad y desarrollo como espíritu se basa en ese amor justo, parejo, imparcial, profundo y verdadero.
Dios es absoluto y perfecto siempre. Con Dios no es necesario negociar, manipular, usar palabras ni conceptos complejos, ni elogios, ni donaciones, ni cumplir con instituciones humanas. Tu alegría, salvación y paz dependen en tu reconocimiento de la verdad y de vivir en armonía con esa verdad.
Jesucristo nos dejo solo un mandamiento, “Ama a tu prójimo como Yo te amo a ti“. Eso es lo único que necesitas Ser. Se amor y estarás reconociendo la Realidad.
La verdad es amor y la verdad es gratis, disponible para todos siempre y es absolutamente justa, transparente, imparcial y aplicable en todo y todos los momentos de tu vida.
Pedro Zaragoza